La gran mayoría de los 3,8 millones de discapacitados de España no se siente discriminada. Nueve de cada diez declaran no sentirse rechazados por los demás. Además, más de un 28 por ciento de los que tienen edad de trabajar ha conseguido un empleo. Sin embargo, aún quedan lagunas para normalizar la vida de estas personas. Sobre todo, en el empleo. La tasa de paro entre los «activos» (la población en edad de trabajar, que tiene capacidad para hacerlo y que busca trabajo o ya lo tiene) asciende al 20,34 por ciento, dos puntos por encima de la de la población general. Estos datos serán incluidos en la Encuesta de Población Activa desde 2011.
Además, el nivel de formación en general es «bajo» y las diferencias entre hombres y mujeres son acusadas: el porcentaje de féminas en edad de trabajar que tienen empleo es diez puntos menor que el de los varones. Así se desprende de la encuesta sobre Discapacidad, Autonomía Personal y situaciones de Dependencia, presentada ayer por la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez.
Pese a la Ley de Dependencia, en lo que se re. ere a la atención personal y a la ayuda que necesitan en su vida cotidiana también hay de. ciencias. En concreto, 2,5 millones de discapacitados reciben alguna ayuda técnica o personal. De ellos, el 31 por ciento considera «insu. cientes» estos cuidados, aunque un 64 por ciento está satisfecho con el apoyo recibido. Además, un ocho por ciento asegura haber necesitado algún servicio de ayuda y no haberlo recibido. La encuesta revela que la carga de cuidar de las personas con discapacidades sigue siendo, mayoritariamente y con mucha diferencia, femenina.
De hecho, el per. l medio del cuidador es el de una mujer de entre 45 y 64 años, que se dedica a la atención personal del discapacitado y a las tareas domésticas y que percibe «especiales dificultades» por falta de fuerza física, tal y como señala la encuesta, que recoge por primera vez las percepciones subjetivas de los afectados.
El ocio, frente a la tele
La mayoría de los encuestados cita como actividades principales en su tiempo libre «ver la televisión» y «escuchar la radio». En tercer lugar, señalan «hacer ejercicio». Sin embargo, los tareas que exigen desplazamientos, como acudir a museos, bibliotecas o ir a cursos, es decir, aquellas para las que muchos necesitan ayuda, son poco frecuentes. Además, «viajar» e «ir de compras» están entre las actividades que les gustaría hacer y no pueden debido a su discapacidad.
LAS CIFRAS
¡ El 8,5 por ciento de la población española (3,85 millones) mani. esta tener alguna discapacidad.
¡ Casi el 60 por ciento de los afectados son mujeres y 2,2 millones tiene más de 65 años.
¡ El problema más frecuente es la movilidad, que afecta al 67,2 por ciento de este colectivo, seguido de las dificultades en la vida doméstica, que sufre el 55,3 por ciento, y de las trabas para el autocuidado (41 por ciento).
¡ Por comunidades, Galicia es la que mayor tasa tiene den discapacidad (112,9 personas por cada mil) y La Rioja, la menor (61,6 por mil).
Jueves. 5 de noviembre de 2009 • LA RAZÓN
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